La isla de Margarita, que se había adecuado para la visita de turistas rusos en 2021, y podría ser la más perjudicada tras la suspensión de vuelos desde Moscú a Venezuela, por parte de los operadores turísticos rusos, obligados por las restricciones del uso del espacio aéreo de la Unión Europea tras las acciones militares de Rusia en Ucrania.
Hasta principio de enero, más de 8.000 ciudadanos rusos habían aterrizado en Porlamar, como parte de un paquete turístico que había sido acordado entre ambas naciones y el que contaba con al menos cinco vuelos semanales.
En medio del conflicto armado, la Asociación de Operadores Turísticos de Rusia (ATOR, por sus siglas rusas), informó que la venta de viajes a Venezuela y otros países de América Latina, como Dominicana, México y Cuba, quedaban cancelados desde el 28 de febrero hasta nuevo aviso.
De acuerdo a la agencia de noticias rusa, Sputnik, la prohibición aérea se convirtió en un “obstáculo insuperable para los vuelos transatlánticos de las compañías aéreas rusas, incluso a los países abiertos”.
Para el abogado aeronáutico, Rodolfo Ruiz, con esta decisión son pocas las ganancias e infinitas las consecuencias. Considera que la única alternativa para hacer frente a la medida estaría en manos de las aerolíneas asiáticas, a riesgo de enfrentar retaliaciones por parte de Rusia.
Gobierno de Venezuela dice que sí vienen los Rusos

Según reseña Noticiero Venevisión, el ministro de Turismo venezolano, Alí Padrón, informó sobre la “extraordinaria reunión” con la Jefa de la Agencia Federal de Turismo de la Federación de Rusia, Zarina Doguzova, en la que se alcanzaron diferentes acuerdos.
Padrón afirmó que Venezuela “está lista para seguir recibiendo a los turistas rusos mediante la operación chárter Moscú – Porlamar”, a la vez que garantiza la continuidad de los vuelos regulares a través de la aerolínea Conviasa.